El Proyecto.

“Vinieron al barrio, se hicieron hinchas, fueron felices y fuimos felices”

De chico me encantaba la ciencia ficción: “Star Wars”, Darth Vader, “Galáctica”, “El hombre de la Atlántida”, “El Increíble Hulk”, “El hombre nuclear”… También leía mucho a Lovecraft; estaba bastante adicto a sus historias sobre los seres que habitaban la Tierra antes de la raza humana. Me metía tanto en sus historias que llegué a dormir con la luz prendida por varios días.

Seguramente, al ver esta idea de “La Boca, 1979”, puedas encontrar un poco de toda la ciencia ficción que vi y leí en mi infancia; sin embargo, verás también otra cosa: el barrio. Y no cualquier barrio, sino nuestro barrio de La Boca. Un barrio que siempre estuvo abierto a “los otros”, un barrio de inmigrantes, un barrio que siempre le abrió la puerta a todos.

En este proyecto no nos invaden, no vienen a aterrorizarnos. “La Boca, 1979” es una historia de amor, de amor a lo distinto, donde todos vivimos juntos, unidos, sin peleas, porque existe un amor mayor que es la comunidad, los vecinos y el club.

Cómo comenzó.

Esto comenzó hace varios años atrás, cuando empecé a hacer collages para mis amigos de las bandas que nos gustaban en La Boca. Hice que KISS del 78 viniera a La Boca, también a los Sex Pistols, a los Ramones. Después hice que la Unión Soviética marche por el barrio, después hice que Perón bajara del exilio en La Boca en vez de en Ezeiza, seguí con Batman, con Rocky corriendo por Catalinas Sur y hasta Rambo, sin rumbo, vagando la Plaza Malvinas. Todas esas fotos las hacía con el teléfono, mientras tenía un segundo entre trabajo y trabajo. Nunca las publiqué, solo iban para mis amigos en el grupo de WhatsApp que tenemos juntos.

La aparición de MidJourney.

MidJourney es un sistema de inteligencia artificial (IA) que genera imágenes a partir de texto.

Cuando en 2023 llegó la IA de MidJourney, me sumergí de lleno en su estudio. Quedé alucinado con el potencial de esta tecnología. Para mí, fue una oportunidad para poner en práctica toda mi imaginación. Comencé a intentar emular algunas partes del barrio, pero no el barrio actual en 2024, sino el barrio que recordaba de mi infancia en los 70´s. Me dediqué a buscar las lentes de aquella época, los colores, los tonos de luz, el ambiente. Después de innumerables pruebas, logré crear una macro que genera las fotos del proyecto “La Boca, 1979”, capturando las sensaciones de aquella época. De esta forma, nacen las imagenes que podes ver. Pero esta es la primera mitad del trabajo visual. La otra mitad la realizo manualmente en Photoshop, haciendo retoques, ajustando detalles, colores o lo que considere necesario para dejar la imagen hermosa y verosímil, que invite a ser observada.

Nace en Instagram: @laboca1979

Un poco cansado de las redes sociales y de tanto odio y falsedad, sentí que había una oportunidad de crear un pequeño oasis, un poco de agua en el desierto de la mala onda. Se me ocurrió realizar la primera “fake news” positiva y generar un mensaje de amor utilizando los recuerdos de mi infancia en el barrio. La idea originalmente la hice para mí y mis amigos, 30 o 40 personas, y ahora hay más de 7.000 personas que ni conozco, que me escriben mensajes hermosos y que se han entusiasmado con la narrativa del proyecto a pesar de estar en Instagram. Todos sabemos que Instagram es una red de imágenes, pero no de historias escritas. Ese desafío me gustó: crear imágenes que inviten a ser vistas, que rompan la monotonía de la belleza irreal que inunda esa red, y complementarlas con historias escritas. Son pequeñas historias para leer en el colectivo, en el inodoro, en la cama o durante una pausa del día.

Las historias.

Las historias están escritas 100% por mí. Salen de mi cabeza, se escriben con mis dedos. Generalmente, son cuentos cortos que comienzan y terminan en la publicación. Así, se pueden leer sin necesidad de conocer una historia previa. Todas son historias positivas y reflexivas, donde el amor triunfa. Y la verdad es que funcionó. Me escriben cientos de personas cada semana agradeciendo por las historias, y muchos de ellos mencionan que las comparten con sus hijos pequeños como cuentos antes de ir a dormir. Y eso es realmente hermoso.

De Instagram al museo Quinquela Martin.

Es para mí un gran orgullo estar en el mejor museo de Argentina, que es también el museo de mi barrio y la casa y atelier donde el gran Quinquela Martín hizo su historia.

En este mágico lugar, podrás disfrutar la historia de “La Boca, 1979”. El primer punto del recorrido es la historia de la casa abandonada en Palos y Necochea. Podes disfrutar las imágenes y, además, apuntando tu cámara a los códigos QR, podes leer más sobre la historia. Hay un total de 24 puntos que nos narran el año en el que vinieron y fuimos felices.

Espero que te guste la muestra.

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