22. La despedida.
La Boca, 12 de Diciembre de 1979.
El barrio se convirtió en el escenario de una despedida agridulce para todos. La decisión de partir no fue fácil. La convivencia entre los visitantes intergalácticos y los habitantes de La Boca había tejido una tela de experiencias compartidas, amistades inusuales y aprendizajes mutuos que enriquecieron a ambas partes.
Pero las sombras empezaron a acechar. Los bigotes y sus autos verdes, incrementaron sus actividades en el barrio. No solo se llevaban a personas, sino que nuestros amigos extraterrestres también empezaron a desaparecer.
Antes de su partida, los extraterrestres quisieron dejar un último recuerdo de amor y alegria. Organizaron una fiesta que se convirtió en leyenda, una celebración que unió a todo el barrio en un estallido de alegría, música y color. Por un momento, la tensión y el miedo se disolvieron en el aire, reemplazados por la risa y el calor humano y extraterrestre.
Durante la fiesta, los “bigotes” se vieron arrastrados por la marea de felicidad que inundaba las calles. Y fue entonces cuando los extraterrestres, en un acto simbólico, decidieron darles la mayor de las palizas a esos agentes de la sombra. Frente a todos, y entre todos, las calles de La Boca eran alegria, amor y también una oportunidad de Justicia. La “paliza” en nombre del amor hizo que por décadas no se vean mas bigotes por el barrio.
Cuando la fiesta llegó a su fin y el alba comenzó a teñir el cielo con los primeros rayos de sol, los extraterrestres empezaron a abrazar uno a uno a todos los vecinos del barrio. Fue el abrazo más hermoso que jamás vi en mi vida. Al terminar, con lágrimas en los ojos, se subieron a sus naves y partieron. No era un adiós, sino un “hasta luego”. Prometieron volver en un futuro. La promesa de su regreso se convirtió en una esperanza que brillaba en los corazones de todos los que esa noche habían compartido un momento de unión única en la historia de La Boca.
Y así, bajo la mirada de un barrio que había aprendido a amar más allá de las diferencias, los extraterrestres se elevaron al cielo, dejando atrás una comunidad fortalecida, libre, y con la certeza de que el universo es, después de todo, un lugar lleno de amigos por descubrir.
Fiesta en la calle Necochea. La Boca, 12 de Diciembre de 1979.
Fiesta en la calle Suárez. La Boca, 12 de Diciembre de 1979.
La tristeza de Marta y su hija por la despedida.
Fiesta en la Calle Brandsen. La Boca, 12 de Diciembre de 1979.
Fiesta en la calle Palos. La Boca, 12 de Diciembre de 1979.